Denzel Washington, Clive Owen y Jodie Foster encabezan el elenco de esta película que explora la tentación del poder, la crueldad de la avaricia y el misterio de un robo perfecto. No todo es lo que parece en Inside Man, un thriller dirigido por Spike Lee. Se estrena el 24 de marzo.
Washington, Owen y Foster interpretan a neoyorquinos rudos, que deben ser más listos que los demás para proteger intereses opuestos en esta novela de suspenso. Interpretan personajes que presentan cada pieza de un rompecabezas interconectado, pero ¿es cada pieza lo que parece?
Los tres actores principales -Washington, como un detective recientemente promovido que debe sobreponerse a un escándalo de corrupción; Owen, como un brillante criminal que cambia lo que creemos que sabemos acerca de un robo bancario, y Foster como una poderosa y misteriosa corredora de bolsa de Manhattan que consigue exactamente por lo que sus clientes pagan altas sumas de dinero- coinciden en Inside Man, en una típica olla a presión de Spike Lee, quien engaña al público con trucos de cámara y cambios de temas.
Todo comienza de una forma bastante simple: cuatro personas vestidas con uniformes de pintores entran al concurrido lobby de Manhattan Trust, una sucursal en Wall Street de una institución financiera a nivel mundial. En pocos segundos, los ladrones disfrazados colocan al banco bajo un cerco planeado milimétricamente y las 50 personas, entre clientes y personal, que se encuentran adentro se convierten en inocentes victimas.
Los negociadores de rehenes del Departamento de Policía de Nueva York, los detectives Keith Frazier (Denzel Washington) y Bill Mitchell (Chiwetel Ejiofor) son enviados a la escena con órdenes de establecer contacto con el cabecilla de los ladrones, Dalton Russell (Clive Owen) y lograr la liberación segura de los rehenes. Trabajando en conjunto con la Unidad de Servicios de Emergencia y su Capitán John Darius (Willem Dafoe), esperan que la situación pueda terminar pacíficamente y que el control del banco y la liberación de aquellos que están dentro pueda ser asegurada en corto tiempo.
Pero las cosas no se dan como se planearon. Russell demuestra ser un inesperado y astuto oponente -inteligente, calmado y completamente en control- un maestro de marionetas con un meticuloso plan para desorientar y confundir no solamente a los rehenes, sino también a las autoridades. Afuera, la muchedumbre crece a medida que la situación se va volviendo cada vez mas tensa, con los superiores de Frazier preocupados por su habilidad de mantener la situación sin que pierda el control.
Los ladrones parecen ser más listos que Frazier y Darius en cada situación. Las sospechas de Frazier de que algo más esta en juego de lo que todos perciben se ve justificada con la entrada de Madeline White (Jodie Foster), una poderosa mujer con objetivos oscuros, quien solicita una reunión privada con Russell. El presidente de la junta directiva del banco, el empresario Arthur Case (Christopher Plummer), está también especialmente interesado en los sucesos que se desarrollan momento a momento dentro de la sucursal.
Pero ¿detrás de qué están los ladrones? ¿Por qué nada ha funcionado para aliviar la situación, que se agrava hora tras hora? Frazier esta convencido de que lazos invisibles están siendo manipulados y negociaciones secretas están tomando lugar a medida que la situación crece inestablemente momento a momento. Con lealtades y motivos cuestionados, el detective se engancha en un riesgoso juego del gato y el ratón. Pero con reglas de juego que cambian continuamente; un movimiento incorrecto puede llevar la volátil situación a una desastrosa y mortal conclusión.